lunes, 9 de marzo de 2015

Mercado global comprar o vender

El enrarecido mercado internacional de inmuebles la cuestión es la misma, cuándo es conveniente comprar, cuándo vender.

El mercado inmobiliaria español, vacila entre ambas acciones debido a la variación que parece incontrolable de los precios.

Mientras los bancos se quedaron con un capital en ladrillo, también es cierto que los bancos no cuentan con la experiencia de las inmobiliarias, y los clientes son complejos de encontrar. La captación de clientes es la virtud que aún se guardan en la bolsa las inmobiliarias.

El 2015 se perfile como el año de los movimientos en el mercado inmobiliario, mientras en Argentina, hay una tendencia de no vender, debido al tipo de moneda en el que hay que realizar la operación, en España lo que faltan son los interesados.

Parecemos el reverso de una situación pero con igual resultado, en Argentina, el mercado de nuevos, sigue en aumento, ya que las condiciones de accesibilidad son mejores, por paradojas de los mercados, el precio de los materiales de construcción permitió el crecimiento de obras nuevas y la baja de operaciones entre los usados desvió la atención de los interesados hacia los nuevos.

En Argentina, los operadores tiene un mensaje claro para el inversos, comprar un nuevo, alquilar usados.

Mientras en Europa la vacilación paraliza el mercado, los inversores cuentan con plazas externas, Argentina se presenta como una opción interesante, con márgenes de negociación que benefician al inversor.

Los buenos o malos momentos para comprar o vender inmuebles, ya no son un aspecto local, la competencia es internacional.

Teniendo en cuenta esto, las plazas disponibles en Argentina, por calidad, ubicación, servicios, son sin duda las zonas en desarrollo, como los que se están llevando a cabo en la Zona Sur.

Los operadores manifiestan dificultades con las operaciones de financiación, pero algunas inmobiliarias desarrolladoras, como inmobiliaria Mazzei, apoyan a sus clientes con financiamientos adecuados, completando el círculo de asumir la construcción de las propiedades, financiar el proceso, financiar al cliente, controlar que las promesas y plazos se cumplimenten como se haya planeado.

Desde ese punto de vista, las asociaciones entre comprador, vendedor, empresa comercializadora ofrecen un panorama necesario de confianza en que las variaciones del mercado no afecten a la inversión.

Aunque ya hace años que la situación de dolarizar el mercado inmobiliario ha lanzado a este sector a una recesión de operaciones, las inmobiliarias que han asumido el cambio y han podido acomodar sus operaciones a las nuevas normas, son las que aún sostienen el mercado.

Comprar o vender es siempre una pregunta que se hará el propietario, para los inversionistas ambas operaciones tienen que poder garantizarse, hasta el momento, confiar en inmobiliarias que se sostienen a pesar de la coyuntura es el primer paso.

El próximo año, se perfila como un año en el que ya hay establecidas relaciones de compromisos con obras nuevas, que siguieron en marcha a pesar de lo que parecían adversidades.

Las nuevas propuestas de desarrollo de nuevas zonas, han salido a ganar la batalla, con calidad, con propuestas y financiación al alcance de los que supieron esperar y confiar.

Son los que actualmente obtienen los beneficios de haber confiando en su momento.